La Arquitectura Moderna en Miranda

El casino de Miranda ha organizado, en colaboración con el ex archivero municipal Carlos Díez Javiz y el arquitecto Alberto Julián Vigalondo, una conferencia el día 19 de abril a las 20 horas titulada «Arquitectura moderna en Miranda de Ebro», en la que conoceremos por qué nuestro casino es un magnífico ejemplo de arquitectura moderna y, también nos contarán cómo desarrollaron su publicación: Miranda de Ebro. Historia del Urbanismo y Guía de arquitectura

Este libro es un estudio exhaustivo de la arquitectura de nuestra ciudad, contempla la evolución urbana de Miranda de Ebro contada a modo de historia, en la que se consigue hacer comprender como la ciudad se ha formado por impulso de su propia iniciativa y gracias al impulso de los planes urbanísticos municipales.
La guía se estructura en 4 zonas diferenciadas por su crecimiento a través delos años: Casco Antiguo. Ebro -Entrevías, Ensanche y Periferia. Dentro de cada conjunto se introducen una serie de edificios por orden cronológico que forman parte del desarrollo urbano de ese tiempo.

El libro se completa con un índice de obras y de arquitectos y se incluye un plano de la ciudad en el que figuran los edificios numerados, con el color característicos de su zona de ubicación.

En lo referente a nuestro Casino el arquitecto fue Manuel Martínez de Ubago y la construcción adapta una forma trapezoide muy bien aprovechada en la que destaca la escalera semicircular en un edificio compuesto por plata baja y un único piso con fachada a tres calles, destacando en la principal el mirador que sobresale en esquina, se asemeja a un torreón de inspiración medieval que descansa en una columna que da acceso a la puerta de entrada.

Y a modo de historia, seleccionamos este fragmento de la introducción que nos realizó el secretario de la directiva actual D. Pedro Martín Delgado.

Tras varios inmuebles ojeados, se determina por elegir el solar que según escrituras dice así.

En Miranda de Ebro, treinta y uno de diciembre de mil novecientos cuarenta y cinco. Don Lucio Barquín Fernández, vende y transmite a la entidad “Casino de Miranda “aquí presentada por el presidente, don Germán Vidondo Pérez, el solar de setecientos catorce metros cuadrados. Por un valor de 80.000 pesetas. Este solar había sido adquirido por el señor Barquín y su esposa doña Adela Ortiz del Rio y Gómez a la Parroquia de San Nicolas de Bari.

Así fue, como colindante al poniente, con la línea de ferrocarril Tudela-Bilbao y al saliente, con pequeños restos del convento de la Magdalena (destruido diez años atrás) y componiendo el número dos de la calle La Estación, donde ha de llevarse a efecto la construcción del añorado chalé Casino de Miranda, en su asiento definitivo.

Situación inmejorable y donde ha de estar en consonancia con los casinos colindantes, para orgullo de sus asociados y de la ciudad de Miranda.

En un entorno crítico económicamente, y faltando todavía de abonar el importe de la compra del solar, en Junta General Extraordinaria celebrada el día 24 de noviembre del año 1946, se autoriza al señor presidente don Germán Vidondo a firmar el contrato de ejecución de obras, según proyecto realizado por el arquitecto don Manuel Martínez de Ubago, y que han de realizarla los constructores don Pablo Alaña y don Jesús Ruiz Bodegaray bajo la dirección del aparejador don Isaías González. El Comité administrativo de las obras estará formado por el presidente del Casino y un socio, don Lucio Barquín o don Justo Tijero según circunstancias.

A primeros de diciembre de 1946 se cancela la cuenta pendiente con don Lucio Barquín por la compra del solar del Casino.

El día 2 de noviembre de 1947, se autoriza al señor presidente, para firmar las Escrituras de Obra Nueva del Chalet Casino de Miranda de Ebro.

En la Junta General Ordinaria del 29 de diciembre de 1946, con el fin de evitar pérdidas importantes de conocimientos tanto de directivos como de ponencia, se acuerda que los Vices pasen a titulares y estos a Vices, quedando, así como presidente don José Mª Aragües, vicepresidente don Germán Vidondo y secretario don Simón Fernández de Larrea. Se concede gratitud al socio don Lucio Barquín por su labor caballeresca en cualquier momento.

Entra en funcionamiento el nuevo Reglamento. Con difíciles acuerdos se acepta la propuesta de don Licinio Martínez como nuevo concesionario. Con ajustes y más reajustes del proyecto de obras, y el Casino pasando por momentos económicamente difíciles. En esta situación avanzan las obras.

El año 1947 finalizará con baile de fin de año.

En Junta General Extraordinaria del día 19 de setiembre de 1948, el señor presidente don José Mª Aragües comunica las muchas dificultades para terminar las obras, pero hoy se puede decir que están a punto de terminar, en breves días se deben realizar los traspasos de enseres y mobiliario, y si no surgen imponderables el día 12 de octubre, podría celebrarse la inauguración. Se firma nuevo contrato con don Licinio Martínez, como concesionario de servicios. No pudiéndose cumplir en la fecha determinada, la inauguración se realiza el día 30 de octubre de 1948.